«Los precios de la carne después de acomodarse en enero bajaron, y en febrero volvieron a bajar 1,5 % más de lo que había bajado en enero, según midió el Instituto de Promoción de Carne Vacuna», sostuvo Miguel Schiaritti, Presidente de la Cámara de la industria y comercio de carnes y derivados de la República Argentina en diálogo con El Regional Digital.

En cuanto a la disminución del consumo de carne vacuna, explicó: «Sigue cayendo básicamente porque la inflación no es sólo el precio de la carne, siguieron aumentando todos los productos de la canasta y fuera de la canasta, y la gente tiene que consumir con salarios anteriores, hasta tanto no terminen las paritarias».

«La gente dejó de comer carne y pasó a comer dos kilos más de pollo», señaló Schiaritti. «Redujo la cantidad de proteína animal. Bajó cuatro el de carne. No es preocupante para la Argentina de todas maneras porque consume 117 kilos de proteína animal», agregó.

El presidente de CICCRA se explayó sobre el modo de consumo de los argentinos de la carne. «La carne en realidad no está cara, si vemos que se sigue consumiendo prácticamente lo mismo, porque el consumidor hace la cuenta de lo que rinde un kilo de carne, o lo que sale una pizza, y lo que pasa es que los salarios están caros», dijo.

Por otra parte, descartó la posibilidad de que el precio de los cortes siga subiendo de acá en más. «No va a haber modificaciones de precios en la carne de acá a los próximos seis meses. La retención de hembras se dio porque el productor piensa que va a ganar plata, se va a seguir produciendo. Si aumentan la producción, no sólo la faena, sino el peso de faena, entonces baja el precio», aseguró.

En cuanto a la exportación, que bajó en los últimos años, reconoció que costará volver a los primeros lugares en el mundo. «No va a ser rápido volver, porque no hay volumen para que aumenten las exportaciones de manera significativa», señaló y cerró: «Si lo ponemos en dólares, es más barato comer un bife de chorizo en Buenos Aires que en el exterior».