El desenlace fue el más triste tanto para sus familiares como para los vecinos de San Vicente y Brandsen: tras una intensa búsqueda, la bombero Aimé Castillo, de 23 años, fue encontrada muerta en un campo ubicado sobre la Ruta Provincial 215, junto a sus pertenencias.

El cuerpo fue hallado este lunes por la tarde por uno de los perros de búsqueda de la Policía, tras unas 48 horas de rastrillajes en una zona arbolada del partido de Brandsen.

Aimé Castillo estaba pasando un duro momento anímico, luego de que, en Año Nuevo, su novio, Daniel Gustavo Lencina, de 47 años, se quitara la vida. Tras ese episodio, estuvo internada para estabilizarse y, al recibir el alta, viajó a la casa de su madre, en la localidad de Brandsen, pese a que vivía con su padre y su hermana en San Vicente. No obstante, desde el sábado no había rastros de su paradero.

En base a las primeras informaciones, Castillo también habría decidido quitarse la vida, tras la crisis emocional que le produjo la determinación tomada por su pareja días atrás. La Justicia aguardará los resultados de la autopsia para determinar los causales de muerte.

Aimé y Daniel eran bomberos voluntarios en el cuartel del partido bonaerense de San Vicente. (DIB)