En una comunicación emitida por el Bloque de Concejales FpV PJ del partido de 9 de Julio cuestionaron la política ambiental en materia del basural que se encuentra “pegado” ya al ejido urbano, delimitándose por tan solo dos cuadras de distancia.
Los concejales de dicho Bloque, Guillermo Rodriguez, Alberto Capriroli, María Elena Defunchio, Horacio Delgado, Martín Banchero y Mariana Pianetti.
Hacen referencia que “el último proyecto de presupuesto que nuestra gestión presentó al HCD el 31 de octubre de 2005, preveía sanear el predio de disposición final de residuos domiciliarios de la ciudad, habilitado en 8 has., incorporadas al patrimonio municipal en 1992. También contemplaba adquirir tierras para un nuevo relleno sanitario, para cumplir normas de ordenamiento urbano vigente desde 2001”.

Tambien hacen referencia que “el Intendente Batistella rechazó esas iniciativas, y pese a ser el primer mandatario local en recibir fondos para destinar a la gestión integral de los desechos urbanos, incumple el compromiso firmado en 2007 ante el Organismo Provincial de Desarrollo Sustentable”.

En otro párrafo recuerdan “han pasado siete años y los engaños del médico mandatario son apabullantes, también en materia de salud y medio ambiente:
1. La Planta de Reciclado que montó con fondos provinciales, no opera a pleno por su negligencia.
2. El programa 3 R fue una mentira electoral, como tantas más.
3. La separación de residuos en los hogares no existe, fue otra farsa.
4. No ejecuta ningún relleno sanitario.
5. No redujo el volumen de lo que se arroja ni impidió que se conformen nuevos vertederos.
6. Incorporó equipo no apto para tareas en el basural, duplicando gastos en disponer de otros equipos.
Los basurales proliferan, están colapsados, y ofrecen postales caóticas. Se acumulan residuos sin tapar ni clasificar, y a veces se queman para reducir volúmenes. Mayores, jóvenes, niños y mujeres en pésimas condiciones de higiene, separan desperdicios para seleccionar o vender. Una familia que envió allí a vivir el Intendente, soporta descomunal riesgo sanitario. Igual sucede con otra, que «habita» en un asentamiento próximo.

Al tiempo que malversa recursos públicos, Batistella no clausura los basurales a cielo abierto ni impide nuevos ni los recupera para uso comunitario, ni adquiere tierras para futuro relleno. Mal parado queda el mandatario con tantas y graves mentiras con las que agrede la buena fe vecinal, como afirmar que la salud es su máxima prioridad y que el «basural controlado era de los mejores de la provincia».

Además, rechazamos que haya querido imponer una nueva Tasa, en este caso para atender estas cuestiones relacionadas con desechos urbanos, pues no presentó como hubiera correspondido, el Plan de Saneamiento, Preclausura, Clausura y Posclausura del basural a cielo abierto de la Ciudad, ni la evaluación ambiental, técnica y económica. Lo más probable era que el monto recaudado lo hubiera desviado, como ocurre desde hace años con varios millones de pesos de fondos afectados.

Podrán decir mucho los innumerables voceros pagos de que dispone, pero como en casi todas las áreas, Batistella perdió el rumbo y el control. El problema de la basura refleja con rotunda contundencia su fracasada gestión, que lamentablemente vienen soportando, desde hace demasiado tiempo, la mayoría de los nuevejulienses.