En momentos en que la cosecha gruesa ya cubrió un 60% del área sembrada, diezmada por la sequía y paralizada hasta este fin de semana por las lluvias casi ininterrumpidas de las últimas dos semanas en la zona productiva, y cuando desde el propio oficialismo, la diputada Elisa Carrió salió a pedir al campo que liquide los dólares de la soja, la comercialización de la campaña gruesa 2017/18 alcanzó algo más de 17 millones de toneladas de la oleaginosa.

Así se desprende de las compras declaradas por exportadores y la molienda a la Dirección de Mercados Agropecuarios del Ministerio de Agroindustria.

De esta manera, al pasado miércoles 9, los sojeros habían comercializado el 46% de la producción total estimada por ahora en unas 37 millones de toneladas.

Por la sequía, la campaña sojera de este año dejará 20 millones de toneladas, o 35% menos, que la anterior cosecha.

Los números de comercialización contra el año previo se encuentra casi 6% por debajo de lo que se había vendido a igual fecha: 18.048.700 toneladas, aunque representó el 32% de la producción total, que ascendió a 57,5 millones de toneladas en el ciclo previo.

Del total comercializado, el 25,7%, unas 9,5 millones de toneladas se hicieron con precio fijado, contra el 12,47% que se había comprometido con precio fijo en la misma época del año pasado.

En cuanto a la campaña pasada, los volúmenes comercializados de soja«vieja» llegaron, al pasado miércoles 9. a las 49 millones de toneladas, al sumar 100.000 toneladas en la última semana reportada.

El total negociado de la cosecha 2016/17 asciende al 85% de lo recolectado, de acuerdo con un reporte de la corredora de granos Zeni.

Con este nivel de comercialización, aun estarían en poder de los productores 8,5 millones de toneladas de la soja «vieja» que podrían volcarse al mercado en los próximos meses.

Para Sociedad Rural ese volumen está en la mitad.

Después de las lluvias, aparecen más daños en la soja.

Fuente: El Cronista Comercial