La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) proyecta que la próxima cosecha de trigo alcanzaría los 15 millones de toneladas. En caso de confirmarse dicha cifra, serían 8 millones de toneladas menos que en la campaña anterior, un 34,8% de caída. Todo esto como consecuencia de la sequía y las últimas heladas.

“El escenario es muy crítico y puede empeorar”, dijeron los técnicos de la entidad. En el último informe que presentaron recortaron en 1,5 millones de toneladas la estimación de producción total, que ahora se ubica en 15 millones de toneladas, y además advirtieron que ya son 400.000 las hectáreas perdidas, y que dicha cifra, lamentablemente, seguirá en aumento en las próximas semanas.

Contemplando que en la campaña anterior la cosecha fue de 23 millones de toneladas, en el caso que se confirme la proyección de la BCR, habrá una merma de 8 millones de toneladas o del 34,8% interanual. También sería un tercio menos del cereal que en 2022. A todo esto, se estima que el rendimiento promedio que alcanzará la cosecha de trigo se ubicará en 27,2 quintales por hectárea, casi 8 quintales menos que en la campaña anterior y 4 quintales menos que la media productiva nacional.

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El informe mensual de la Bolsa de Rosario detalló que hasta el momento, por la sequía y las heladas tardías, el 63% de Buenos Aires está en el nivel más bajo de reserva de agua respecto a los últimos 30 años. “Si bien en esta estimación se está siendo optimista con los rindes en zonas bonaerenses que aún disponen de tiempo y se espera que sean alcanzadas por lluvias que en este momento están desarrollándose en la zona central, los análisis de los técnicos no son alentadores”, advirtieron los especialistas. Y agregaron que en zonas como Tandil, Azul, Balcarce y Benito Juárez, se estiman daños de 15 a 20% en rendimientos de trigo por el efecto de las heladas del 28 de setiembre y el 14 de octubre, y el ambiente de estrés hídrico en el que se desarrollan.

Otras zonas

El informe de la BCR señaló que en la provincia de Córdoba “el trigo pasa por un escenario de desastre productivo”, donde se estima, como media provincial un rendimiento de 21,6 quintales por hectárea y una caída de producción del 63% respecto al 2022. Además, el mencionado territorio quedará muy lejos de acercarse a los 36 quintales por hectárea que se consiguió hace un año atrás.

En lo que respecta a Santa Fe, se proyecta un rendimiento de 26 quintales por hectárea, cuando en la campaña anterior se alcanzó los 39 quintales por hectárea. A todo esto, se presenta un panorama muy complejo desde lo productivo, ya que apenas se cosecharán unos 2,6 millones de toneladas, un 48% menos que en el último ciclo.

Por último, Buenos Aires también muestra una gran caída, donde en principio produciría un 21% menos que hace un año atrás, y con un rendimiento de 31 quintales por hectárea, contra los 37,3 en el 2022. “Pero puede sufrir un grave recorte si no se revierte la dramática situación de falta de agua de este momento y continúan las heladas”, señalaron los técnicos de la Bolsa de Comercio de Rosario.