El presidente Alberto Fernández con confirmó hoy el retorno de las clases presenciales este año y minimizó las reticencias del gremialismo docente a volver a las aulas debido al rebrote de Ciovid-19: Como se va a avanzar en el operativo de vacunación, “no debería haber ninguna oposición por parte de ellos”, dijo. Además, acusó de “oportunismo” a su antecesor Mauricio Macri, que había pedido la reapertura de las escuelas.

“El dictado de clases es para mí un aspecto prioritario en este año. Hay razones de desarrollo de los chicos que así lo exigen. Pero también hay razones de desarrollo social que lo hacen imperativo. Perder un año de educación y conocimiento es muy grave para cualquier sociedad y eso es algo que no nos podemos permitir”, definió el Presidente en diálogo con un portal de noticias, al cabo de una semana de debate público sobre la vuelta de la presencialidad escolar.

Fernández buscó así llevar certidumbre en un tema que preocupa a padres, madres y docentes en el marco del rebrote de contagios. Ayer, al cabo de dos reuniones entre la administración porteña de Horacio Rodríguez Larreta y los gremios docentes, se confirmó el retorno de las clases presenciales a ese distrito el 17 de febrero: La CABA será el primer territorio en reiniciar el ciclo lectivo, mientras que en la Provincia el reinicio será el 1 de marzo.

Tras las críticas que formularon a Larreta no solo los gremios docentes de la ciudad, sino también bonaerenses, Fernández hizo hincapié el en operativo de vacunación como reaseguro. “Tenemos previsto que todos los docentes reciban la vacuna, porque es esencial que ellos estén protegidos de los contagios” dijo. Y concluyó: “Yo entiendo que a partir de esta cobertura de inmunización no debería haber ninguna oposición por parte de ellos”.

Por otra parte, en línea con lo señalado ayer por el ministro Nicolás Trotta, Fernández apoyó el regreso a las aulas “con los cuidados debidos para los alumnos y con las garantías sanitarias para los maestros y profesores”.