Campaña 21/22
Trigo: Proyectan una siembra de 7 millones de hectáreas y cosecha de 20 millones de toneladas.
Los distribuidores de insumos agropecuarios bonaerenses anticiparon una buena campaña de granos finos 2021-2022, en sintonía con las estimaciones oficiales, que proyectan una siembra de 7 millones de hectáreas y una cosecha de 20 millones de toneladas.
Estos números son similares a la intención de siembra del último ciclo, que se vieron pulverizadas por factores climáticos y un volumen de producción que se ubicó en 17 millones de toneladas, lejos de las expectativas iniciales.
Un dato a tener en cuenta es que la relación entre insumo y producto es favorable, aún a pesar del aumento de algunos insumos, como es el caso de los fertilizantes.
Esta situación fue compensada por la suba del precio internacional del trigo, que en Chicago cotiza a USD233 la tonelada, unos USD37 más en comparación con abril del año pasado.
Lionel Camps, gerente general de la Cámara Empresaria de Distribuidores de Agroquímicos, Semillas y Afines Bonaerense (Cedasaba), estimó que, si bien quedan por definir algunos planteos en trigo y cebada, «las últimas lluvias que hubo en la provincia serán un incentivo para que se decida incorporar más hectáreas de granos finos».
En diálogo con BAE Negocios, el directivo estimó que la estrategia de manejo de los productores apuntará a engrosar rendimientos -con precios internacionales por demás seductores- pero sin descuidar la calidad, a través del manejo de variables agronómicas como la fertilización. En promedio, el cereal tuvo rindes de 4.700 kilos por hectárea en el sudeste bonaerense durante la última cosecha, pero en lotes puntuales -y de acuerdo con el material sembrado- puede llegar a superar los 7.000 kilos por hectárea.
Si bien la compra de semillas se realiza a un ritmo menor en comparación con el año pasado, se percibe una buena performance en comercialización de fertilizantes, sobre todo fosforados. Camps remarcó que el agricultor invierte en tecnología porque sabe que el negocio pasa por maximizar rindes.
También destacó una tendencia que se puede ver en esta nueva precampaña comercial, que es un mayor uso de curasemillas. «No era tan habitual, pero ahora el productor busca asegurar la implantación del cultivo», remarcó.
En un webinar que la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios organizó a fines de marzo, funcionarios y analistas le pusieron números a la próxima campaña del cereal. En este sentido, se presentaron dos escenarios respecto del área sembrada, con un piso de 6,5 millones de hectáreas y un tope de 7 millones. Con un rinde promedio de 3.100 kilos por hectárea -y de no mediar incidencias climáticas-, se alcanzarían las 20 millones de toneladas, que a precios actuales generarían USD4.660 millones. En ingresos fiscales, y con un 12% de derechos de exportaciones, representan USD550 millones que ingresan en las arcas fiscales.
Deja un comentario