El intendente de Rivadavia, Sergio Buil aseguró que “el próximo gobierno deberá potenciar las fuerzas productivas del interior abriendo las exportaciones sin restricciones, quitando retenciones a las economías regionales, reduciendo o eliminando las retenciones para producciones como trigo, leche y girasol, y reduciendo considerablemente las de maíz”.

Y agregó: “Es necesario generar confianza y previsibilidad para la próxima siembra de cosecha fina que comenzara en el mes de mayo y la un poco más lejana de cosecha gruesa. También es necesario que vuelvan a funcionar los mercados de futuros que son los que les permiten al productor darle previsibilidad a su negocio. Con pocas medidas se puede hacer mucho, con pocas decisiones se pueden impulsar altos niveles de inversión que son necesarios para poner en marcha al campo”.

Buil analizó la situación de las economías del interior, de las que aseguró que “atraviesan serias dificultades producto de diversas circunstancias internas y externas”. Tales como “el cierre de las exportaciones o el control de exportaciones de manera arbitraria, la caída de los precios de los comodities a nivel internacional, que llevan a una muy difícil situación para las economías regionales y para algunas producciones en particular.

Asimismo agregó que “la caída del precio del petróleo y la gran producción de granos y oleaginosas a nivel mundial y especialmente en Sudamérica (Brasil y Argentina) y los EEUU han generado una situación particularmente delicada para nuestra economía agropecuaria. La caída del precio del petróleo hace que se utilice menos maíz para la producción de etanol, lo que lleva a una sobre oferta de grano, con la consiguiente caída de precio”.

“La gran cosecha de soja en los EEUU y la esperada en Argentina y Brasil han llevado los precios de la oleaginosa a valores muy inferiores a campañas anteriores, la soja que en Chicago hace poco tiempo llego a valer u$s 600 hoy vale unos u$s350 y en la argentina el año pasado para esta época la soja valía $2900 y hoy vale $2300. El trigo, girasol y leche son tres productos con enorme cantidad de problemas”, concluyó Buil.