Estaba previsto para el lunes que pasó un encuentro de la Mesa de Ganados y Carnes con el Presidente de la Nación. Finalmente, a pocas horas y con rumores de fuerte tensión entre la industria frigorífica y los exportadores, se anunció que Macri no participaría de la reunión.

A las 15 horas del lunes se reunieron los dirigentes con funcionarios de la Secretaría en la sede de Agroindustria. Miguel Schiariti, titular de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA), habla de que fue un encuentro de «mesa chica», con poca presencia de referentes del sector y abundante asistencia de funcionarios.

Bajo el rótulo de «reunión técnica», el encuentro se extendió por más de tres horas. Cerca de las seis de la tarde del lunes, los dirigentes salieron sin querer dar declaraciones tras una cumbre en la que parecía no haber existido ninguna definición concreta.

Esa misma tarde Agritotal pudo saber que desde CRA, con la presencia de su Presidente, Dardo Chiesa, se pediría al Gobierno la apertura del mercado para exportar ganado en pie, tal como lo hace Uruguay a Turquía. Sin embargo, esto no habría caído bien en la industria, que advierte que esas ventas al exterior no contribuyen al agregado de valor.

Schiariti asegura que salió «totalmente insatisfecho y decepcionado», porque «se habló de todo pero no se definió nada», y resalta que estos encuentros se llevan a cabo desde hace algún tiempo ya, y siempre se ha prometido desde el Estado tomar acciones, pero nunca se pusieron en marcha.

Uno de los temas sobre los que el titular de CICCRA advierte que no hay determinaciones es el estándar sanitario, algo sobre lo que se acordó avanzar ya en julio del año pasado. «Nos dicen que se está avanzando pero no pasa nada, y sigue siendo errónea la definición porque hay frigoríficos que tienen veterinarios del Senasa y otros que pagan los suyos, entonces no hay un estándar único», dice.

En esa línea, Schiariti también criticó que «todavía nos siguen explicando cuál es el volumen de faena de cada fábrica, pero no lo tienen claro ellos aún». Lo concreto -explica- es que a medida que se va faenando no salta un alerta de cuándo se pasó el límite. «Hace un año que vienen diciendo que podrán límite a la faena en función de las condiciones edilicias y la cantidad de empleados que hay trabajando, pero no lo hacen», agrega.

Sobre el final, el referente de la industria cárnica salió al cruce del Gobierno porque se había resuelto que ARBA dejaría de exigir a los frigoríficos que retengan una alícuota del 8% de Ingresos Brutos a carnicerías no inscriptas. Finalmente, desde este mes se volvió a poner en marcha esa retención, y el dirigente afirma que «con eso vuelven a estimular que nadie se inscriba, porque es una Tasa impagable».

Fuente: Agritotal