En Córdoba, Federación Agraria resolvió pedir la suspensión del remate de La Remonta
En las actuales condiciones, para los pequeños productores es imposible acceder a la subasta. Por eso la entidad dice ‘No al Remate’ y solicitará que las 8.500 hectáreas de las que el Estado pretende desprenderse en la zona de Ordoñez, sean destinados a un verdadero desarrollo territorial, con arraigo, producción de alimentos, más mano de obra y aportar al consumo a nivel local
Las autoridades nacionales de Federación Agraria Argentina estuvieron el viernes al frente de la asamblea de productores en la zona de Ordoñez, Córdoba, en las tranqueras del Establecimiento Rural General Paz, perteneciente al Ejército Argentino.
En dicho lugar, tras un intenso debate, los productores presentes resolvieron pedir una nueva audiencia con la AABE y la suspensión del remate de las tierras de La Remonta, porque con las condiciones establecidas para la subasta, los pequeños productores no podrán acceder a la misma. «Los chacareros no podemos competir de igual a igual con grandes empresas, inversores, fideicomisos, pooles de siembra o capitales extranjeros. Por eso decimos que la subasta no es el mecanismo para asegurar que los pequeños productores puedan acceder a la tierra, ni garantizar un modelo sustentable ambientalmente y que y que genere desarrollo», se indicó desde FAA.
El establecimiento General Paz La Remonta pertenece al Ejército y se pusieron a la venta por subasta 8.500 hectáreas del mismo. FAA inició oportunamente gestiones ante el Estado nacional para que los pequeños y medianos productores puedan tener acceso a trabajar esas tierras. Pero las condiciones de la subasta diseñada la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) no aseguran que los chacareros puedan participar de la misma. Por tal motivo, según indicaron los dirigentes de Federación Agraria, se pedirá que «estas 8.500 hectáreas, que representan un 30 por ciento del total de un distrito promedio, sean destinadas al desarrollo territorial de la zona, para el arraigo, la producción de alimentos, con más mano de obra y aportando al consumo a nivel local.
No podemos bajar los brazos. Decimos ‘No al Remate’ y pedimos acceso a la tierra, como un modelo a tomar para el resto del país, para otras localidades en las que podamos generar iniciativas similares y revertir la concentración productiva. Proponemos que la política de reutilización de tierras del Estado, sea en beneficio de la comunidad y no sólo de unos pocos inversores».
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