Desde hoy rige en todo el país un aumento de 4,5 y 5% en las naftas y el gasoil de todo el país. El sector agropecuario estaba en alerta por el impacto que esto podría tener en la producción, y sobre eso habló el responsable del Departamento Económico de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Matías Lestani, en exclusiva.

El miembro de CRA analiza el contexto y advierte que están en alerta para ver qué nuevas negociaciones hace el Gobierno con las petroleras para intentar licuar el impacto. «Vimos esa baja proporcional del Impuesto a la Transferencia de Combustibles (ITC) y creemos que el camino es por ahí», indicó.

«Van a tener que seguir bajando el impuesto básicamente para tratar de que funcione como colchón amortiguador al impacto que podría tener esto si se mantienen las condiciones de hoy y se libera esta tregua que hicieron con las petroleras», agrega.

Para Lestani, es necesario tener en cuenta que, en ese caso, «si bien ya ha avanzado bastante la siembra de la fina, nos agarraría con los principios de laboreo para la gruesa, y no hay que olvidarse que cada medio punto que suba con mil millones de pesos para el sector«.

¿QUIÉNES PIERDEN?

Los principales perdedores en esto son los productores pequeños, sobre todo aquellos que no son agrícolas -advierte Lestani-, que «levantarán la voz porque les pega directo en los insumos, pero también saben que su producción subió con el tipo de cambio».

«Pueden estar más complicados financieramente porque vienen de la sequía y lo que ya conocemos, pero sus productos están atados al dólar y van a seguir», explica, y recuerda el contexto: «Subió mucho el ingreso del maíz, muchos ingresos de la soja, el trigo tiene una perspectiva bárbara, incluso con la intención de siembra más importante de la historia».

Para el titular del Depto. Económico de CRA, es el productor pequeño -ese que transforma el grano en leche y carne- el que «está complicadísimo». A eso le suma las actividades productivas de las economías regionales.

«Sabemos que el insumo del gasoil es importantísimo para un tambero, por todo: grupos electrógenos, camiones, etc.», detalla Lestani, y sostiene que «todo esto repercute en forma directa».

Además, destaca que las demás condiciones tampoco son alentadoras: «La leche no parece subir el precio ni hay tendencias a eso, y -por lo que nos dijeron los industriales- no hay mucho para arriba que puedan hacer, con lo cual el valor de la leche es el mismo que hacia fines del año pasado, pero los costos siguen ascendiendo, lo que complica aún más al tambero».

Fuente: Carola Urdangarin/Agritotal