En la mañana de este jueves personal de la Secretaria de Desarrollo con la Comunidad a cargo de la Lic. Franca Lombardo debió dar respuesta a una familia con 4 hijos menores que habitaban una casilla construida con chapas y sin baño, ubicada en Almafuerte y Homero Manzi y que tras las potentes ráfagas del viento, lluvia y ante la posibilidad de llegar a lo peor, se tomó la decisión de evacuar a la misma y derivarla hasta el CIC (Centro Integrador Comunitario).

Hasta allí llego la asistencia, sin embargo la mujer, Karina Gongora (31) y sus cuatro hijos, debieron ubicarse en la cocina del SUM, en el CIC, cerrar con telas el lugar, mientras tanto quienes habitualmente acuden al lugar para las distintas tareas de talleres entre otros, debieron convivir con la familia, hecho que empezó a incomodar a la propia mujer que comenzó reclamar una respuesta, tal como la que viene realizando desde hace un tiempo en que se le ayude en la construcción de una habitación con material.
Situación
A las 18hs. la redacción de El Regional Digital fue informada del hecho, a lo que la convecina, Karina, detallo su crítica situación señalando que su reclamo no es de ahora, ya tiene más de un año cuando por necesidad y su desesperación se atrevió a usurpar un terreno, tras ello Municipalidad le cedió un terreno hace 4 meses(Manzi y Almafuerte), donde por no poder construir (solo percibe la AUH), construyo con la ayuda de allegados una casilla de chapas, mientras tanto su insistencia por la promesa de materiales para la construcción no ceso, hasta que llego hace pocas semanas y solo alcanzo para levantar 6 filas con ladrillo hueco, un rectángulo de 3 mts. x 6 mts. a partir de allí, asegura no hubo más respuesta.
Desde la semana pasada en que el clima adverso mostro sus fuerzas, la débil casilla de chapa comenzó a ceder y el agua a ingresar y humedecer las pocas pertenecías que Karina y sus hijos tienen (colchones, ropa de cama, una cocina, mesa, sillas y vajillas)
“Reconozco mi situación pero no puedo vivir tirada en cualquier lugar, esto golpea en lo más profundo”, reflexiono la joven mujer.
La mujer asegura que le han prometido que vendrá la respuesta, pero la necesidad le urge manifestarse, mas sabiendo que se encuentra “tirada” en el CIC, aunque agradece por el paliativo(también le alcanzaron colchones secos y mantas polares), pero se siente como una intrusa, porque “el lugar es utilizado por los vecinos que se acercan al lugar y no pueden utilizar la cocina, porque yo les estoy invadiendo el lugar”, asegura.