En Argentina, continua el interrogante de qué hacer con el trigo. La cosecha finalizó en 10,2 mill. de t., según la BCBA. El Minagri, por su parte, publicó que la producción sería de 11 mill. de t. El problema no radica en el volumen obtenido, sino en la pérdida de calidad de esta campaña.

Un mapa emitido por la Cámara Arbitral de Cereales de Bahía Blanca, en base a las partidas ingresadas por el puerto de Ingeniero White en Bahía Blanca (ver al fin de la nota), indica que el promedio de la proteína alcanzada en la materia prima recibida, principalmente de departamentos del sur de la provincia de Buenos Aires y algunos de La Pampa, es del 9,8%, es decir, en la mayoría de las zonas evaluadas la calidad se encontró por debajo de lo requerido por la industria.

Es de destacar que, las harinas para pan, de las que requieren menor nivel de proteínas, provienen de trigos que contienen como mínimo niveles del 12% o 13%.
Del 73% de los casos analizados, la calidad fue menor al 10,5%. Esto puede representar una mejora del precio para aquellos que tengan una buena calidad del cultivo, cuando sea demandando por la Molinería.

La falta de calidad puede generar pérdida de competitividad frente al resto de los países desde donde Brasil origina trigo.

En este sentido, la Dra. Martha Cuniberti, del laboratorio de calidad industrial de cereales y oleaginosas del INTA Marcos Juárez, destacó que “el productor debería aplicar fertilizantes, en especial nitrogenados, en dosis recomendadas de acuerdo a la fertilidad de sus lotes de manera de incrementar rendimiento y calidad, y a la vez, para frenar la caída de la proteína que se produce cuando la planta tiene escasez de nitrógeno”.

Entre otros detalles de esta situación perjudicial para la cadena de trigo argentina, la especialistas, que disertó en la última Fiesta Nacional del Trigo realizada en Leones, remarcó que “a nivel nacional, se está estimando un promedio de proteína del orden del 9%, en la zona central del 9,2% y en la zona sur del 9,3% en la presente campaña, haciendo que el trigo argentino se ubique en el mercado internacional dentro del tipo forrajero para consumo animal. Ya se está exportando con este destino a países como EE.UU donde sus trigos se cotizan a un mejor precio, vendiendo su propia producción y comprando trigo bajo costo para la elaboración de balanceados para cerdos. También lo están demandando países del sudeste asiáticos con fines semejantes. Lo lamentable es que Argentina dispone de genética, trigos de alta calidad panadera, semejante a los principales países exportadores como Canadá, Australia y EE.UU, pero que luego no pueden expresar su potencial por falta de nitrógeno suficiente para formar proteína y gluten en las masas. Mejorando el manejo del cultivo se podría satisfacer mercados exigentes con volumen, que es otro inconveniente que se suele presentar al ofrecer trigo argentino clasificado”

Además, subrayó que “la relación rendimiento/proteína depende de la disponibilidad de nitrógeno. Para tener un buen contenido de proteína en grano son necesarios 30 kg/N/ton producida. A mayor rinde es de esperar una caída en la proteína en general. Para revertir esta relación negativa se debe recurrir a la fertilización nitrogenada, de ser posible fraccionada en siembra y macollaje, momento para mejorar ambos parámetros a la vez”.

Frente a esta problemática, y teniendo en cuenta que se eliminaron las retenciones a la produción de trigo, es posible esperar para la próxima campaña una apuesta a la fertilización por parte de productores para encontrar una mayor rentabilidad a cosecha. Si a ello se le suma la posibilidad, que actualmente estudian el Gobierno Nacional y el sector comercializador, de premiar con mejor precio la calidad de la materia prima, el cultivo de trigo seguramente podría ser más próspero.

Situación del mercado
Los compromisos de entrega se encuentran retrasados frente a lo acontecido el año previo a igual momento. El volumen asciende a 3,1 mill. de t. frente a las 6,1 mill. de t. del ciclo 2014/15. Esto puede deberse a que los productores se encuentran esperando una mejora del precio.

En principio, según destaca un informe de Aacrea, es difícil vislumbrar un mejor valor para un trigo que no presente parámetros de calidad. Si se observa el precio a futuro julio, el mismo cotiza a 156 u$s/t. brindando una mejora de 20 u$s/t. respecto al valor actual. Dependerá de los factores internos y el ritmo de ventas al exterior que este precio mejore.

Por otra parte la demanda de la exportación se encuentra retrasada respecto a la campaña pasada, acumulando compras por 2,5mill. de t. de la campaña 2015/16. A su vez, las Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) se ubican en 2,7mill. de t. aproximadamente. Este volumen se incrementó frente a la semana pasada en 1, 36mill. de toneladas, mostrando que la exportación ha comenzado a realizar ventas.
De continuar con este ritmo, es posible ver una demanda más activa y una mejora en los precios.

mapabahiablanca