El cimbronazo que se dio este año en el partido de 9 de Julio producto de las inundaciones que comenzaron a generalizarse desde el 4 de febrero pasado y que durante varios meses ha venido anegando campos y cuanto camino rural tuvo a su paso el agua, dejo un impacto económico muy significante no solo para el productor agropecuario, sino también sideral para la economía de la ciudad y pueblos.

Desde El Regional Digital siempre se ha estado encima de la situación hídrica que se ha dado en el partido de  9 de Julio y región, donde ya sobre el final de la campaña 24/25 muchos lotes de soja y maíz que no se pudieron levantar, y aquellos donde las cosechadoras ingresaron, aun están en un silo bolsa. La primera producción que se afecto fue la ganadera de carne, ya que los bajos y cañadas se inundaron, y por ende comenzó a tener un corrimiento de su ambiente.

El inicio de la campaña 25/26 también fue complicado para los productores de  9 de Julio que planificaban una gran campaña de cultivos de inverno, y apenas un 20% pudo cumplirse, lo mismo con maíz temprano. Esto comenzó a exhibir que varios prestadores de servicios en algunos de los casos salieron en búsqueda de trabajo en otros distritos.

Campos y caminos rurales inundados en zona Dudignac durante el mes de agosto – Foto El Regional Digital

Si embargo mientras esto sucedía tranquera adentro de los establecimientos en lo social del distrito comenzó a evidenciar signos del impacto de la inundación. Además de la educación y el no poder contar con caminos rurales, los prestadores directos del campo empezaron a evidenciar su reducción en las labores al campo.

 Las inundaciones en el partido de 9 de Julio dejaron una pérdida productiva y económica

Con el fin de tomar un cabal conocimiento de lo que le pasa a la economía local, y que la comunidad tome conciencia de cómo impacta en toda la cadena de forma directa e indirecta cuando no se hacen las obras necesarias para afrontar una situación hídrica como la que se ha enfrentado.

En ese sentido se conoció que desde Sociedad Rural de 9 de Julio, junto con la Agencia de Extensión Rural INTA  9 de Julio, el Circulo de Ingenieros Agrónomos de 9 de Julio, y la Regional Aapresid 9 de Julio-Casares elaboraron un informe con el objetivo de tomar dimensión de la perdida productiva y económica en 9 de Julio.

El informe elaborado por las cuatro entidades, describe que 9 de Julio en materia agro productiva;  de las 250.000 has.  agrícolas y 150.000 has. ganaderas,  donde unos 3.000 actores de toda la cadena, como productores, servicios, contratistas, transportistas y empleados rurales trabajan, la superficie productiva se redujo un 42%, esto es 141.500 has. agrícolas y 85.000 has., en ganadería; lo que redunda en 700.000 toneladas de granos que se dejaron de producir en el distrito.

El impacto económico

De acuerdo a lo elaborado por Sociedad Rural 9 de Julio, el INTA local, el Circulo de Ingenieros y la Regional Aapresid, la facturación que el campo de 9 de Julio esperaba tener para este año era de unos 283,7 millones de dólares, pero eso se redujo a tan solo 169,7 millones. Es decir, una caída de 113,9 millones de dólares que no esta en la economía nuevejuliense.

A que es equivalente la pérdida económica por esta inundación

Las entidades no solo se centraron en lo que paso tranquera adentro, sino en el impacto social que genero esta inundación en el distrito, donde las pérdidas económicas, según graficaron, son equivalente a:

-La no venta de 4.665 autos Toyota Yaris

-18 millones de bolsas de cemento

-115.706 sueldos promedios del distrito

-17.223 viajes menos de camiones al puerto

-30,4 millones de dólares que el Estado deja de recaudar en retenciones

Desde estas paginas siempre hemos sostenido, que si bien la falta de obras en el Rio Salado han colaborado en que el agua no escurriera debidamente. También colaboro y  podría haber impactado mucho menos, si por ejemplo el ex intendente Mariano Barroso no cerraba en el 2022 la denominada «Mesa Agropecuaria», porque molestaba que tanto Sociedad Rural y productores reclamaran por el arreglo de caminos, limpieza de canales y alcantarillados.

Los últimos dos años de esa gestión municipal fue en tiempo de sequia, nada se hizo. La llegada de la gestión de Gentile atendió los reclamos de la entidad Rural, pero las prioridades siempre se mostraban hacia otro lado. La segunda mitad del año 2024, el pedido de limpieza de canales y un plan de obras sobre caminos  rurales no dejaba de ser insistente, solo se respondía a lo expresado por el «Semáforo de Caminos Rurales». Llego el agua y nada se pudo hacer a pesar de los esfuerzos de cientos de productores  de los distintos cuarteles.

Ante esto descripto, nos aferra a sostener que si el Estado Municipal hubiese priorizado hace varios años, en especial durante la seca (se lo hace con menos costos), las obras necesarias antes descriptas, el impacto seguramente era mucho menor. Ahora es solo lamento, enojo, bronca, costo político, y sobre todo una gran perdida productiva y económica en 9 de Julio.