Lo que temían que viniera, eso sobrevino, Alberto  Fernández dio su primer vuelta de rosca a las retenciones en producciones agropecuarias, y aún faltan las agrícolas. AF dejo de lado su discurso del 10D en eso de tender puentes, y la medida fue inconsulta.

Tras ello, las palabras del Ministro Basterra, “No nos sirve que el campo no crezca, no nos sirve que a las empresas no les vaya bien”, quedaron empantanadas y ahora sostiene “esta medida no es más que una adecuación”.

Además dentro de las primeras medidas, se introdujo la doble indemnización por despido, que no es más que reconocer y prever por parte del gobierno que con estas medidas se recientan aún más las economías productivas, y que ya recibió el rechazo de las 43 cámaras comerciales del oeste bonaerense, que ayer sábado se reunieron en 9 de Julio.

La decisión no fue errónea, fue calculada. Mañana lunes 16 a las 17hs. el presidente en Casa Rosada presenta el denominado “Consejo contra el Hambre”, un plan que contempla entre otras cuestiones una tarjeta alimentaria. Había que decir de donde sale ese dinero para dicho programa.

Pero la medida publicada el último sábado (no se conocen muchas resoluciones publicadas en un sábado), tampoco contempla el aporte de la minería, ni de la renta financiera, no dice que el sector legislativo debe resignar parte de su dieta, o el no ingreso a las cámaras de puestos laborales (políticos), por lo que queda claro que al denominado Consejo contra del Hambre lo tiene que pagar solo el campo.

Por eso al campo solo le faltó ver la acción, la foto ya la tenía, y en las bases rurales empezaron a cruzar whatsapp con tono de movilización.

Por Ciriaco Torres

Director El Regional Digital