Era el medio día de aquel domingo del 22 de abril de 2007, cuando el grueso de la familia nuevejuliense además de compartir la mesa, palpitaban el desarrollo de la quinta competencia del TC, la máxima competencia automolistica de nuestro país y que se desarrolló en el Autódromo de la ciudad de Comodoro Rivadavia y donde competía el nuevejuliense, Guillermo Castellanos

Aquel día en la final de la competencia, se produjo un choque protagonizado por cuatro vehiculos conducidos por  Tito» Bessone, Laureano Campanera, Pedro Dandlen y Guillermo Castellanos, cuando transcurría la sexta vuelta en la denominada «Curva del Mar».

Producto del accidente, fue el propio Castellanos el que llevo la peor parte. Minutos mas tardes del accidente, el Departamento Médico de la ACTC comunicaba el fallecimiento del piloto Guillermo Castellanos a causa de múltiples traumatismos producidos en la competencia desarrollada en el Autódromo de Comodoro Rivadavia», señaló en un escueto comunicado.

Guillermo Castellano – foto Diario El 9 de Julio

Ese día el almuerzo en  9 de Julio, termino en el silencio total y el dolor de quienes conocieron al destacado piloto, que precisamente había iniciado su competencia de TC en ese mismo autódromo patagónico.

Hoy 22 de abril de  2019, a 12 años su fallecimiento, aun se recuerda a Guillermo como ese vecino afable, sencillo y correcto, además de su entusiasmo por los ‘fierro’ y poder luchar y crecer desde el manejo y las competencias que lo pusieron en un podio elevado.

Castellano había competido en distints categorías como la Fórmula Renault Argentina, la Monomarca Gol y se destacó años más tarde en las categorías TC Pista. Eran sus avales anteriores para llegar al Turismo de carretera.

Guillermo era hijo de Oscar Castellanos e Hilda Zontella. Tenía dos hermanos, Oscar y Claudia; y dos hijos, Paulina y Guillermo.  A 12 años e aquel hecho se lo recuerda con nostalgia y se rememoran sus afectos ante el cariño que había prodigado en la comunidad y quienes lo trataron y conocieron.