El último evento GDT vio el aumento general del índice de precios por cuarta vez consecutiva; aumentando en un 8,3% en general desde la subasta anterior. Este es el mayor aumento desde noviembre de 2016, impulsado por un salto del 14% en el índice de precios LPE (en todos los períodos de entrega).

Si bien los precios de LPE aumentaron en todos los períodos de entrega, el aumento más fuerte (24,5%) se observó en los contratos a corto plazo (entrega del 20 de agosto).

La atracción de los precios de LPE se ha relacionado con el aumento de los volúmenes colocados en la subasta combinado con una fuerte demanda a corto plazo. Se dice que la demanda en China aumenta a medida que se recupera el servicio de alimentos, generando la necesidad de una cobertura adicional a corto plazo. En esta época del año, los niveles de producción en Nueva Zelanda (NZ) son estacionalmente bajos y las existencias disminuyen. Puede ser que la mayor disponibilidad en el último evento estimuló a los compradores y aumentó las compras.

Los últimos resultados aumentarán la prima de precio de NZ sobre el producto de la UE que se produjo desde abril. La duración de la recuperación de los precios dependerá del tamaño de esta prima en relación con los costos de transporte desde Europa, y la medida en que la demanda esté impulsada por la necesidad de cobertura a corto plazo, donde el tiempo de entrega es más importante que el precio.

Precios – fuente OCLA

Los precios de los lácteos experimentan el mayor salto desde 2016 en la subasta de GDT

NZ Herald – por Jamie Gray

La fuerte demanda de la mayor exportación de Nueva Zelanda, la leche en polvo entera (LPE), elevó los precios considerablemente en la última subasta Global Dairy Trade.

El índice de precios GDT aumentó un 8,3%, su mayor aumento desde noviembre de 2016 y la cuarta ganancia consecutiva en la subasta dos veces al mes.

Los precios de la LPE, que tienen la mayor influencia en el precio de la leche al productor de Fonterra, subieron un 14% a US $ 3.208 por tonelada y volvieron a donde estaban a fines de enero de este año.

Los precios de la LPE subieron durante todos los períodos del contrato, aunque los ascensos fueron más fuertes para los contratos con fechas más cercanas que indican una fuerte demanda a corto plazo, dijo en un comentario Amy Castleton, analista de lácteos de NZX. La LPE de grado regular para enviar en septiembre aumentó un 16,3%.

«Es probable que los compradores hayan estado tratando de ingresar mientras los precios son relativamente bajos y mientras el producto esté disponible, con la producción de leche para la próxima temporada incierta», dijo.

Sorpresivo aumento del precio de los lácteos en GDT

INALE en base a información de la Bolsa de Valores de NZ

El aumento de los lácteos en la plataforma GDT sorprendió a todos los analistas internacionales del sector lácteo a impulsos del precio de la LPE. Aumentaron los precios de todos los productos excepto los de la Grasa Butírica Anhidra.

La Bolsa de Valores de Nueva Zelanda había pronosticado una leve suba de la LPE pero no era dable esperar un aumento del 14%.

El nivel de precios de la LPE actual es similar al de enero de este año 3.200 dólares/tonelada.

En este momento se pueden establecer algunos alcances sobre este aumento:

• Es indiscutible que es positivo el aumento de LPE a 3.200 dólares la tonelada.
• Se trata de un aumento no previsto y no de un nivel de tendencia, por lo que es importante la cautela a la hora de la interpretación de este dato.
• Cabe mencionar que estamos en una época del año donde la producción de leche está en un nivel más bajo: el pico del norte fue en marzo y el pico del sur en setiembre. Por lo tanto, menos volumen de leche.
• Si hubo una compra de China de forma significativa (por el momento no podemos adelantar ese dato), junto al punto anterior impulsa los precios al alza, pero el 14% es demasiado elevado, en momentos del año en que China no es fuerte en compras.
• Según la Bolsa de Valores de Nueva Zelanda, es probable que los compradores hayan estado tratando de comprar mientras los precios son relativamente bajos, y mientras el producto esté disponible (hay disponibilidad limitada en Nueva Zelanda), con la producción de leche para la próxima temporada incierta.

Habrá que esperar al pico de producción del sur, para tener una idea más acabada de los precios para lo que queda del año.

Todavía no se han resuelto los efectos del COVID-19 y la demanda mundial global está retraída, por lo tanto, si bien se trata de una buena noticia, la incertidumbre sigue presente en el mercado.

raducido y extractado por el OCLA de las fuentes citadas