A través de la circular Nº 2 firmada por su administrador general, Nelson Periotti., la Dirección Nacional de Vialidad frenó nuevas contrataciones y todos los proyectos que se encontraban en trámite. Esto alcanza a la obra para convertir la Ruta Nacional 7 en una autovía seguirá esperando y su realización dependerá de la voluntad del próximo gobierno.

Los fondos de Vialidad están entre los más suculentos de los que maneja el Gobierno, sólo detrás de los presupuestos destinados a cubrir los subsidios a la energía y muy por delante de lo que reciben Aerolíneas Argentinas y la mayoría de los planes sociales.

Para este año, por ejemplo, la DNV tiene autorización para gastar $ 22.228 millones, seis veces más que los fondos destinados específicamente a la obra pública.
La mayor parte de sus recursos están destinados a volcar dinero en las rutas: más de $ 12.000 millones para nuevos tendidos, otros $ 3651 millones para el mantenimiento y 4101 millones en los corredores viales concesionados, según los números de ejecución presupuestaria.

Según da cuenta el diario villeguense “Actualidad”, el colega “Democracia” de Junín consultó a funcionarios de la Dirección Nacional de Vialidad y el Ministerio de Planificación Federal e Inversión Pública, para saber si la medida alcanzaba a las licitaciones realizadas para la construcción de la autovía en la Ruta 7 en los tramos San Andrés de Giles – Carmen de Areco y Chacabuco – Junín, pero no se obtuvo respuesta.

De acuerdo a lo que dice el escrito, las licitaciones 7/2014, 8/2014 y 9/2014 realizadas en abril del año pasado, quedaron afectadas por la circular. Es que las primeras dos, aún no fueron adjudicadas a ninguna de las empresas. En cuanto a la tercera, el contrato ya fue firmado (sin fecha de inicio de obras), pero la asignación de esos recursos quedó condicionada a una previa aprobación.

Asimismo, además de la ruta 7 se ve postergada nuevamente, al ni siquiera figurar, la construcción de la autovía Mercedes-Carlos Casares sobre la ruta nacional Nº 5, tantas veces anunciada por los presidentes Néstor Kirchner y Cristina Fernández e incluso por el actual gobernador de la Provincia y aspirante presidencial del oficialismo, Daniel Scioli, en tanto esa vía de comunicación sigue produciendo accidentes que aumentan las estadísticas de mortalidad en el tránsito.
Carta a la Presidenta de la Nación

Los autoconvocados de Chacabuco le escribieron una carta a la presidenta Cristina Kirchner, en la que expresan:
«Accidentes, más accidentes. Víctimas fatales, discapacidad física o psíquica, familias destruidas, amigos, compañeros de trabajo, vecinos. El pueblo no puede acostumbrarse a tanto dolor».
«Después de ocho años del decreto 1106/07, se continúa esperando y trabajando para que la obra se concrete, tal como se había proyectado originalmente. (…) ¡Por favor Presidenta, aquí va la vida del pueblo de la Nación y de los países vecinos, porque es ¡una ruta internacional! ¡Porque es un corredor bioceánico! «Chacabuco cumple 150 años de vida el próximo 5 de agosto. Que ese día también pueda festejar, junto a los trabajadores de vialidad, el inicio de la construcción del tramo total Chacabuco? Junín de la autovía Junín-Giles para un tránsito seguro, y para la consolidación de un corredor bioceánico en Sudamérica. Por la inclusión, por la patria y el destino de los pueblos. Abraza y confía en usted, el pueblo de Chacabuco».

Petitorio de usuarios de la Ruta Nacional Nº 5 al Administrador General de la DNV
Un extenso petitorio publicado en las redes sociales, han enviado usuarios de la Ruta Nacional Nº 5 cuyo texto dice: “Hace años que la ruta nacional Nº 5 espera la autopista y la autovía prometidas. Reclamar su construcción es defender nuestra vida: necesitamos al menos 2 carriles de cada mano para circular más seguros. Mientras gobiernos, funcionarios y la empresa incumplen la promesa y lo exigido por el contrato de concesión, muchísimas personas mueren o padecen accidentes que afectan sus vidas, trabajos y economías.
En 2013 murieron casi 7 personas por día en rutas de la provincia de Buenos Aires, según la entidad Luchemos por la Vida. Y la ruta 5 es una de las más recorridas: por ella circulan camiones que transportan leche, granos y carnes de la pampa húmeda, además de productos industriales y miles de personas vinculadas con los 11 partidos bonaerenses (Luján, Mercedes, Suipacha, Chivilcoy, Alberti, Bragado, Nueve de Julio, Carlos Casares, Pehuajó, Trenque Lauquen y Pellegrini) y los 2 departamentos pampeanos (Catriló y Capital) que atraviesa en sus 545 kilómetros de largo.
Mientras, el fondo para infraestructura vial, al cual aportamos con el combustible que compramos, se utiliza en su mayoría para otros fines y no para financiar las autopistas y autovías que nos merecemos.

Hagamos algo para proteger nuestras vidas, las de nuestras familias y amigos, y las de todos los que transitan la ruta 5. Por favor, firmá la petición.
En 2008, la ruta 5 fue concesionada por el gobierno nacional a la empresa Homaq SA, que creó el Ente Concesionario H5 SA (decreto presidencial 866/08). La concesión obligaba a mantener la autopista entre Luján y Mercedes -aún no terminada- y a construir una autovía entre Mercedes y Bragado.
En 2013, se firmó una «readecuación» de la concesión (resolución 842 de la Dirección Nacional de Vialidad), que acortó la construcción de autovía hasta Chivilcoy. Hagamos que las quejas por el estado de la ruta 5 se conviertan en acción: esta es la oportunidad de que nuestras demandas lleguen a quienes tienen el poder de resolver el problema. Y también es nuestra oportunidad como ciudadanos de ejercer el derecho de exigir lo que nos corresponde. Ni más ni menos”.