40: En el país de la carne, Rodríguez Larreta contrató a un chef para enseñar a los niños a cocinar hamburguesas de legumbres con el propósito de combatir el cambio climático

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Hoy viernes se realizó la última jornada de la Cumbre Mundial de Alcaldes C40, que reunió en la ciudad de Buenos Aires a representantes de 121 ciudades de todo el mundo con el propósito de consensuar nuevos compromisos en la lucha contra el cambio climático.

En los últimos dos días alcaldes, intendentes y delegados comunales, junto con expertos en cambio climático y representantes de sectores sociales y empresarios, debatieron diferentes aspectos relacionados con acciones orientadas a reducir o mitigar los efectos nocivos generados por las emisiones de gases de efecto invernadero.

En ese marco, el jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), Horacio Rodríguez Larreta, junto al alcalde de Londres, Sadiq Khan, presentaron un documento, denominado “Consenso de Buenos Aires”, que propone fomentar actividades y empleos “verdes” por medio del financiamiento de organismos internacionales como el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo.

Entre los múltiples eventos realizados, hubo uno en particular que llamó mucho la atención de integrantes del sector agropecuario en general y ganadero en particular: la contratación, por parte del gobierno de CABA, de un chef para enseñar a cocinar con legumbres.

El chef en cuestión, Pedro Lambertini, estuvo hoy en una escuela porteña (Primaria Común N° 21 Ángel Gallardo de Recoleta) para ofrecer a los alumnos una clase sobre preparación de legumbres para “concientizar sobre el medio ambiente” a los niños. En concreto, Lambertini preparó hamburguesas de garbanzo.

El mensaje implícito detrás de esa acción promovida por el gobierno de Rodríguez Larreta es relacionar el consumo de legumbres con la necesidad de disminuir el consumo de carne vacuna para así ayudar a combatir el cambio climático.

Las hamburguesas de garbanzo –seguramente deliciosas, porque Lambertini es un gran chef– en otro contexto habrían resultado inofensivas. Pero en la Cumbre C40 tienen el propósito de atribuir a la ganadería una responsabilidad central en las emisiones de gases de efecto invernadero en general y de metano en particular.

El estándar establecido por el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC por sus siglas en inglés) determina que una molécula de metano (CH4) es equivalente a 28 moléculas de dióxido de carbono (CO2). Sin embargo, existe evidencia científica que indica que el metano generado por bovinos no puede ser considerado como un gas de efecto invernadero en términos equivalentes a dióxido de carbono porque forma parte de un ciclo natural.

ambién debe contemplarse en sistemas ganaderos la factibilidad de mitigar el cambio climático por medio de prácticas que promuevan una acumulación progresiva de carbono en el suelo a través de una gestión de pastizales que promueva la recarga de biomasa aérea y subterránea.

Otro aspecto esencial –contenido en el último documento del Consejo Agropecuario del Sur (CAS) firmado por Brasil, Argentina, Uruguay, Paraguay y Chile– es considerar a la actividad agropecuaria como garante de la seguridad alimentaria y el desarrollo social, factores críticos en naciones con elevados niveles de pobreza y exclusión.

Posicionar al sector agropecuario como parte de la solución al problema del cambio climático es precisamente la propuesta que I Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) llevará a la próxima Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP 27), que se celebrará en Egipto en el próximo mes de noviembre. En ese evento, en el que se definirá el futuro de las acciones colectivas de mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero, IICA mostrará cómo los avances en siembra directa, cultivos de servicio, pasturas y sistemas silvopastoriles –entre otros– son recursos esenciales para amortiguar el impacto del cambio climático por medio del secuestro de carbono.

Bichos de Campo

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