Un informe del Foreign Agricultural Service perteneciente al Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) se refirió a la profunda crisis que arrastra hace años el sector tambero en el país y aseguró que en el primer tramo de 2017 la producción de leche será «ajustada» a causa de «una significativa reducción de la competitividad, una menor inversión en la actividad tanto local como extranjera y una creciente concentración en el sector primario».

«Los productores continúan expresando su rechazo a la política cambiaria del Gobierno Nacional, la cual reduce la competitividad de las exportaciones lácteas en los mercados internacionales.

Además, siguen reclamando asistencia financiera y mejoras en los precios recibidos por la leche», resaltó en alusión a los reclamos que las entidades del agro llevaron a cabo en las cuencas más importantes del país durante los últimos años.

De todas maneras, el organismo estadounidense estimó que la situación se recuperará «paulatinamente en el segundo semestre», ya que 2016 resultó para la actividad «un año devastador».

«La lechería argentina está comenzando a recuperarse de una de las crisis más importantes de los últimos veinte años», consideró.

«Los tamberos, que registraron ingresos muy ajustados en el primer tramo de 2016, se encuentran mayoritariamente con problemas financieros agravados por inundaciones catastróficas que afectaron a las principales regiones productoras», recordó el estudio, al tiempo que expresó que «si bien el clima mejoró a partir del mes de agosto, se proyecta que el 80% de los tambos están en situación crítica con conflictos económicos crónicos».

El Economista