La Mesa Agropecuaria de Buenos Aires rechazó el adelanto de los vencimientos de impuestos
"La medida es impracticable, ya que desde el último trimestre del año los productores planificaron sus movimientos económicos con cuotas que vencían en marzo, julio y noviembre", comunicaron desde la Mesa.
La Mesa Agropecuaria de la provincia de Buenos Aires –integrada por la Sociedad Rural Argentina, Federación Agraria Argentina, CONINAGRO y CARBAP– rechazó este ultimo lunes, el adelanto de los vencimientos del impuesto inmobiliario rural informado la semana pasada por la Agencia de Recaudación de Buenos Aires (ARBA).
Para las entidades, la medida «es impracticable, ya que desde el último trimestre del año los productores planificaron sus movimientos económicos con cuotas que vencían en marzo, julio y noviembre, calzando financieramente sus ingresos e inversiones productivas con dichas erogaciones».
En ese sentido, aseguraron que el cumplimiento de los nuevos plazos, «impide afrontar inversiones productivas tal como estaba previsto».
«Nuevamente desde ARBA no se cumple con la palabra empeñada, y más aún modifican calendarios sin previo aviso, haciendo impracticable el cumplimiento en tiempo y forma de los plazos de pagos e impidiendo a muchos productores acogerse a los beneficios previstos por la provincia como buen contribuyente», agregó el comunicado.
En tanto, subrayaron que este tipo de medidas «no hacen más que dejar en evidencia una vez más la discrecionalidad en el manejo de la cosa pública de la gestión del gobernador Scioli, como así también permite vislumbrar la actitud a llevar en futuras responsabilidades de gobierno».
«No solo hay falta de resolución a los problemas que el ejecutivo provincial se comprometió a solucionar en múltiples ocasiones sino modificaciones a lo ya establecido que complica al productor en su actividad productiva», sentenció.
Finalmente, las entidades de la Mesa bonaerense subrayaron que «exhortan al gobernador Daniel Scioli a que deje sin efecto esta medida autoritaria que no hace más que dificultar la actividad económica del interior bonaerense, al tiempo de generar suspicacias políticas frente a la urgencia recaudatoria».
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