Cuando el centímetro vale: Demuestran que un menor espaciamiento en maíz es beneficioso
La charla de maíz y girasol que este miércoles 15 brindo desde Sociedad Rural de 9 de julio, el Ing. Agr. Luis Ventimiglia, de la AER INTA 9 de julio, incluyo un capítulo sobre espaciamiento y densidad de siembra, donde el agrónomo vertió interesantes datos de resultados en ensayos realizados en distintas oportunidades en campo de productores de 9 de Julio, con el foco en el distanciamiento y densidad de siembra.
Ventimiglia en dialogo con El Regional Digital, recordó que en Argentina el maíz se siembra a 0,70 cm y 0,52 m entre hileras y con densidades variables de acuerdo a zonas y ambientes productivos.
En ese marco la última campaña 19/20 en el ensayo de maíz concretado en el Establecimiento “El Deseado” entre Norumbega y la ciudad de 9 de julio, utilizando los medios y elementos que contaba el productor, con el objetivo de ver cuáles podrían ser las ventajas y las dificultades que pudiesen presentar los sistemas utilizados.
El ensayo tuvo dos componentes a evaluar: La distancia entre surcos: 0,70 cm – 0,52 m y 0,35 cm y la densidad de siembra fue de 70.000 y 90.000 semillas sembradas para cada espaciamiento.
Resultados
Pese a que el año no fue de los más bondadosos en cuanto a las lluvias, la densidad más alta permitió alcanzar los mayores rendimientos, para los tres espaciamientos empleados, En el promedio general, 90 mil semillas superó a 70 mil semillas por 5,8 % ( 791 kg/ha). En la Tabla 1 se presentan los datos para cada uno de los espaciamientos.
Tabla 1: Efecto de la densidad sobre el rendimiento para tres espaciamientos entre hileras (kg/ha)
«A medida que la distancias entre hileras se acortó, el rendimiento fue mayor», concluyen. El menor espaciamiento logró incrementar 12,7 % el rendimiento sobre el espaciamiento más grande y 8,2 %, sobre el espaciamiento intermedio.
El incremento de rendimiento entre 0,70 m y 0,35 m promedio de ambas densidades es de: 20,5 kg/ha por cada centímetro que se acorta la distancia entre surcos.
Los resultados alcanzados son muy alentadores, y muy parecidos a otros obtenidos en campañas anteriores, que se inicio en la 04/05 por la AER 9 de Julio del INTA.
El estudio agrega que la posibilidad de acortar la distancia entre hileras, dentro de un mismo espaciamiento, permite obtener una distribución más homogénea dentro del área a sembrar: «Esta condición brinda la posibilidad a las plantas de explorar un ambiente aéreo y radicular con menor competencia interplantas, disponiendo cada una de ellas una cantidad de recursos más homogéneos».
Por otro lado, al permitir el espaciamiento más estrecho cubrir el suelo más rápido, permite una serie de ventajas, por ejemplo, competir mejor con las malezas, evitar la evaporación del agua, favorecer que el agua se transpire y de esa manera se convierta en fotoasimilados, usar mejor los recursos, alcanzar un índice de área foliar crítico más temprano, etc.
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