Los biocombustibles en la descarbonización y el papel decisivo de la política: los casos de Toyota y Córdoba

En el Congreso Maizar 2025 se exhibieron un auto de Turismo Carretera 2000 con motor E40 (40% de bioetanol) y uno convencional con motor híbrido fuel, para cualquier mezcla de bioetanol y nafta. Detrás de este tipo de decisiones para la sustentabilidad del planeta hay políticas públicas activas, como la que desarrollaron Brasil y la provincia de Córdoba. Sobre eso hablaron Roberto Matarazzo Braun, director de Comunicación de Toyota Brasil, y Fabián López, ministro de Infraestructura y de Servicios Públicos de Córdoba, en un panel moderado por Juan Cano, gerente de la empresa Promaíz.

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Cómo la política pública implementada por Brasil en materia de biocombustibles le permitió a Toyota ofrecer cada vez vehículos más sustentables desde el punto de vista ambiental fue el eje del tema que desarrolló Roberto Matarazzo Braun, director de Comunicación y Relaciones Públicas de Toyota Brasil.

Partiendo de que el mundo está sufriendo el impacto del cambio climático y que es necesario reducir las emisiones de carbono (CO2) de manera progresiva, el ejecutivo recordó que Toyota empezó con este proceso en 1997, con el inicio de la fabricación del Prius, el primer modelo híbrido. “Desde entonces, ya hemos vendido más de 30 millones de vehículos bajo estas condiciones en el mundo, en su mayoría híbridos, con una reducción de más de 176 millones de toneladas de CO2 en la atmósfera. Estamos plenamente comprometidos a avanzar hacia la carbono neutralidad”, destacó.

En materia de tecnología para descarbonizar el ambiente, cada región tiene sus propios requisitos de oferta y de demanda por parte de los consumidores. En Norteamérica, por ejemplo, la preferencia de los consumidores son los vehículos de mayor tamaño. En Japón es totalmente distinto, prefieren autos más compactos. En Europa, el consumidor busca confort y confiabilidad, comentó Matarazzo Braun.

En el proceso de descarbonización de la industria automotriz, el ejecutivo identificó seis tecnologías que han llegado para quedarse: BEV (Battery Electric Vehicle), que son los vehículos completamente eléctricos, propulsados solo por un motor eléctrico alimentado por una batería; FCEV (Fuel Cell Electric Vehicle), que son vehículos eléctricos que utilizan celdas de combustible para generar electricidad, que luego alimenta un motor eléctrico; IC, de combustión interna; H2, que utiliza hidrógeno como combustible; PHEV (Plug-in Hybrid Electric Vehicle), autos  híbridos que pueden ser enchufados para recargar su batería y que combinan un motor de combustión interna con un motor eléctrico, y HEV (Hybrid Electric Vehicle), vehículos híbridos que utilizan un motor de combustión interna y un motor eléctrico, pero que no se pueden enchufar para recargar la batería.

“Son muchas las opciones que hoy la industria automotriz ofrece al consumidor para descarbonizar el planeta”, indicó el ejecutivo, y anticipó que en el futuro se sumarán más.

La política de promoción del bioetanol en Brasil

Brasil viene siendo pionero en el uso de bioetanol desde hace 50 años. Comenzó con la caña de azúcar y ahora tiene en el maíz a su actor protagónico. Para la producción de caña, en Brasil utilizamos solamente 1% del territorio. El maíz es mucho más federal y tiene más posibilidades de crecer en esa industria”, puntualizó.

Además, Brasil ya cumple 22 años es el uso de los motores flex, que pueden funcionar con bioetanol al 100%.

La utilización de estos motores, que paradójicamente también se producen en la Argentina pero que no se utilizan en los vehículos que se comercializan en el mercado interno, tiene en Brasil un amplio marco de promoción, que incluye: la reducción impositiva para los vehículos que tienen esos impulsores, en comparación con motores convencionales; el financiamiento a las terminales para la producción de unidades con este tipo de motores, y el mercado de bonos de carbono para los productores de bioetanol.

“En términos de biocombustibles, tenemos mandatos muy claros y una perspectiva, una previsibilidad, para el aumento de la mezcla progresivamente. Son políticas de Estado que se van consolidando”, indicó.

En 2019, Toyota en Brasil fue pionera en la introducción del primer auto, un modelo Corolla, con impulsor híbrido-flex. En 2021 presentó un segundo modelo, el Corolla Cross, que se exhibió en el hall central del Congreso Maizar 2025, en el Goldencenter. Este vehículo emite 70% menos de carbono a la atmósfera, lo que muestra que el impacto de esa tecnología en relación con el ambiente es marcado. “En los últimos 20 años, la combinación de los motores flex y el uso del bioetanol ha permitido reducir 50% el consumo de gasolina”, dijo.

Para avanzar en el desarrollo de tecnologías más amigables con el ambiente, Toyota tiene en banco de prueba tres nuevos vehículos; un auto eléctrico “enchufable” con etanol, una pick-up a biometano con GNC y un híbrido a partir del bioetanol.

Córdoba: de la Vaca Muerta a la Vaca Viva

Fabián López, ministro de Infraestructura y Servicios Públicos de Córdoba, presentó una visión contrastante entre dos modelos de desarrollo energético e industrial, con las metáforas de la «Vaca Muerta» y la «Vaca Viva».

Según el funcionario, el modelo de la Vaca Muerta se basa en la extracción de combustibles fósiles, como la cuenca neuquina, que es la segunda reserva mundial de shale gas y la cuarta de shale oil. “Este es un recurso finito y su uso no sólo implica la extracción de un recurso no renovable, sino que también está intrínsecamente ligado a la emisión de gases de efecto invernadero. La industria petroquímica, derivada de este modelo, ha generado una extensa cadena vertical que produce numerosos subproductos esenciales para la vida moderna en sectores como el textil, transporte, construcción, comunicaciones, farmacéutico e higiene”, explicó.

Frente a esto, se plantea el desarrollo de lo que muchos denominan la Vaca Viva. Este modelo aprovecha el mismo mecanismo de fotosíntesis oxigénica que, al enterrar biomasa durante millones de años bajo presión y temperatura, dio origen a los combustibles fósiles, pero, se basa en la biomasa actual. Esta se introduce en un proceso de bioeconomía circular que utiliza un capital natural renovable y no finito. Representa un «yacimiento» de muchos más kilómetros cuadrados que el de los fósiles y posee un tremendo potencial bioeconómico.

“A través de un proceso de biorrefinería, esta biomasa puede generar los mismos subproductos industriales que se obtienen del petróleo. La biomasa puede generar, al igual que el petróleo, productos como paracetamol, amoxicilina y elastómeros. Este modelo de bioeconomía circular, al añadir conocimiento a una biomasa renovable, se concibe como un modelo económico de tremenda potencia para la Argentina. Su sostenibilidad radica precisamente en que deja de emitir gases de efecto invernadero que impactan sobre el clima”, destacó.

El ministro contó que Córdoba fue pionera en la implementación de políticas y experiencias alineadas al modelo de la Vaca Viva. “Córdoba es la principal productora de maíz y de bioetanol de la Argentina, y ese bioetanol equivale al 6% de todas las naftas comercializadas en el país. A partir de él se generan subproductos como aceite de maíz, dióxido de carbono biogénico (usado en la industria carbonatada), burlanda y vinaza”.

“A contramano de algunas restricciones regulatorias nacionales, Córdoba ha impulsado políticas de fomento al consumo de biocombustibles”, detalló el ministro. Desde 2023, se ha iniciado la migración de la flota pública provincial (de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial), y actualmente, unas 2.100 unidades están utilizando E17, 5 puntos porcentuales más que la mezcla obligatoria. “Se ha demostrado que vehículos que no son flex fuel pueden usar mezclas más altas sin modificaciones, hasta cierto porcentaje”, agregó López, y puntualizó que se realizaron pruebas exitosas con emuladores para simular vehículos flex y se probó E70 en 60 unidades de la flota pública.

Además, Córdoba cuenta con la primera estación en la Argentina donde se expende al público E17 y B20 (biodiésel con conte de 20%), iniciativa que ha sido posible gracias a la experiencia previa con la flota pública.

Como estrategia de difusión y ratificando sus resultados, el gobierno provincial ha trabajado con otros actores importantes, como el rally cordobés, cuyos autos corren con E17 desde el año pasado. Y la categoría Turismo Carretera 2000 a nivel nacional corre con E40. “Casi mitad Vaca Viva y mitad Vaca Muerta en el tanque de combustible”, graficó.

“Estas iniciativas demuestran un compromiso con el desarrollo de un modelo bioeconómico basado en recursos renovables, buscando sustituir gradualmente la dependencia de los combustibles fósiles y sus derivados”, cerró el funcionario cordobés.

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