“La Provincia Activa se regodea en transgredir las normas”

“Precarización laboral docente”, denuncia el Foro de Consejeros Escolares de la UCR bonaerense. Para cobertura de cargos en Centros de Actividades Infantiles se debe ser monotributista, aportarán a AFIP pero no al IPS, sin cobertura asistencial del IOMA y sin cómputo de antigüedad.

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El Foro de Consejeros Escolares de la Unión Cívica Radical de la Provincia de Buenos Aires, que coordina el ex consejero general de Educación Carlos Cebey, salió con una fuerte declaración ante los llamados a coberturas de cargos en los denominados Centros de Actividades Infantiles (CAI) que funcionan durante el verano en escuelas públicas de distintos distritos, dependientes de la Dirección de Políticas Socioeducativas de la Dirección General de Cultura y Educación.

“Precarización laboral docente”, denunció el organismo del radicalismo bonaerense que nuclea a los representantes partidarios en las administraciones escolares distritales, afirmando que “la ‘Provincia Activa se regodea en transgredir las normas”  y especifica que “quien se haga cargo de lo pedagógico al ser monotributista aportará a la AFIP pero no al IPS (Instituto de Previsión Social de la Provincia de Buenos Aires), no tendrá IOMA ni sumará el tiempo de servicio a su antigüedad docente y ambulatoria”.En cuanto a los auxiliares, señalan los foristas, acusa a la administración bonaerense por designaciones “por fuera del listado de aspirantes que tiene cada Consejo Escolar de Distrito, sin acto público y sin control de los gremios respectivos”.

“En suma”, afirman: “esto se llama precarización laboral, por fuera del Estatuto del Docente y por fuera de la Ley 10430 para el personal de la Administración Pública”.Señala, asimismo, que “alejadas de la normativa estatutaria estas convocatorias para la cobertura pedagógica de los CAI que hacen las Jefaturas de Inspección Distritales con otros organismos burocráticos en forma discrecional y con las informalidades de la vía telefónica o los correos electrónicos – sumado a ello la gravedad de comprometer a los directores de las unidades escolares en su difusión por fuera de las reglas y para burlar las normas –, crean desconfianza y constituyen una falta de respeto más a quienes ejercen y a quienes aspiran al ejercicio de la actividad profesional docente y a las familias de los niños que reciben el servicio, que debe ser de calidad”.

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