La Picasa crece y amenaza el tránsito en la RN 7

Share on FacebookShare on Google+Tweet about this on TwitterShare on LinkedIn

El fantasma de las últimas inundaciones del 2001 vuelve a presentarse: pero esta vez, aunque también causen preocupación y alarma en Junín, significarán la oportunidad de poner a prueba las obras realizadas en los últimos años para preservar el casco urbano de la ciudad.

Ayer por la tarde, el nivel de la Laguna La Picasa habíase elevado al punto que el sector por donde la atraviesa la Ruta Nacional 7 se encontraba –a simple vista- en riesgo inminente, como lo atestiguan las fotos de la nota.

Avance sin pausa. Junín es un lugar de paso del agua, controlado por el canal del Salado y las lagunas, y según confirmó el subsecretario de Obras Públicas del municipio, Marcelo Balestrasse, la altura máxima del terraplén en la Laguna de Gómez ya fue superado por el agua.

Nuevamente en la función pública, tras haber vivido desde la misma Secretaría las anteriores inundaciones en el distrito, Balestrasse dijo que “lo que pasó en Junín no se olvida más, y años después vuelve a tocar el infortunio. La diferencia es que antes no había obras y ahora sí, pero en diez años no se usaron y así que estamos en el bautismo de fuego de estas obras”.

“No tengo los datos precisos, pero se está repitiendo el evento del 2001, y la magnitud del agua es muy grande, así que con preocupación y ocupación estamos tocando todos los resortes posibles para el seguimiento de este proceso, con un gran caudal de agua que pasará por la vera de la ciudad y ojalá sea como hasta ahora”, apuntó.

El funcionario explicó que “el sistema funciona de esta manera: la Laguna Mar Chiquita es un reservorio, que se hizo con 13 kilómetros de terraplén y hormigón, con compuertas y un vertedero. La parte superior de ese vertedero tiene una cota de 77,50, y se abre y se cierra para mantener la laguna funcionando, que no se muera la fauna”.

“Además, empieza a recibir aportes y cuando se llega a 80 cm. se cierran las compuertas para almacenar el agua, y todo lo que excede pase en forma regular por el canal. Hoy estamos en 78.20, estamos por debajo así que en las miles de hectáreas que tiene la Laguna nos dan esperanza de mayor almacenamiento”, agregó.

Balestrasse dijo que “de este lugar salen 135 cm3. según la velocidad de agua, y tiene dos entradas: la Cañada de las Horquetas, que viene muy cargada desde la zona de Pinto; y el aporte del río Salado a la altura de Arenales, sobre la Ruta 50, con el arroyo Piñeyro”. Según remarcó, “todo este aporte excesivo de agua se produjo por los 400 milímetros que llovieron aguas arriba”.

Sistema a prueba. “Con todo esto, ahora se verá cómo funciona el sistema, lo que se diseñó hace doce años. Nuestra preocupación es que todo esto pasa al lado de la ciudad, la avenida de Circunvalación con los barrios aledaños, que están muy cerca del canal”, apuntó el subsecretario de Obras Públicas.

En este marco, dijo que “estamos esperando que nos indiquen las autoridades provinciales si debemos cerrar los desagües pluviales de la ciudad para que el agua no retorne al río, o si hay que esperar unos días para cerrar las compuertas”.

“Acá no es como pasó en Pergamino que llegó el volumen de agua de golpe: el agua va avisando, canalizada, regularmente, pero hay que seguirla de cerca en forma diaria y es lo que estamos haciendo”, remarcó.

Balestrasse indicó que “la única diferencia con los demás partidos es que Junín tiene un sistema organizado para transportar agua. Pero todo tiene un límite, porque si tenemos la desgracia de otra gran lluvia, no habrá sistema que aguante, así que debemos estar muy atentos”.

“Este sistema está diseñado para preservar cascos urbanos, pero los campos aledaños a la Mar Chiquita se verán afectados”, advirtió, indicando que “además, hay muchas zonas bajas, y más allá de los ingresos de la Salada y la Cañada de las Horquetas, también recibimos agua en la Laguna de Gómez del lado de Lincoln, que viene en forma superficial y anegando campos”.

Las cotas. En cuanto a las últimas mediciones, Marcelo Balestrasse contó que “si bien no es una laguna de reserva, están abiertas las compuertas del Carpincho y la laguna, tratando de evacuar el agua lo más rápido posible”.

“Cuando vienen estos eventos, se escucha todo tipo de versiones. La cota de altura son 3 metros, lo que mide una compuerta, así que más que eso pasaría por arriba. No puede frenarse. Pero están abiertas porque la autoridad quiere que fluya el agua lo más rápido posible”, explicó.

En tal sentido, agregó que “hoy la Laguna de Gómez tiene el vertedero a cota de 75 cm. y hoy está en 75,70, o sea que pasa agua. En la Mar Chiquita hay una cota de 75.50 y hoy estamos en 78.20, además de las compuertas abiertas”.

Fuente: Laverdadonline.com

Deja un comentario